Mejor almohada antirreflujo | Guía de compra

Con la gran variedad de modelos disponibles, te recomendamos consultar a tu médico antes de comprar una almohada antireflujo.

Porque hay ocasiones en que este tipo de cojines puede perjudicarte más que beneficiarte.

Los 3 criterios más importantes de un cojín antireflujo son:

Tamaño e inclinación

Hay muchos tamaños de almohadas antireflujo, elige el tamaño que se adecue a tu complexión y a las medidas de tu colchón.

El cuánto a la inclinación, lo mejor es seguir las indicaciones de un especialista.

La inclinación adecuada para ti, depende de la postura en la que duermas y de otros padecimientos que tengas.

Las primeras veces que emplees un cojín antireflujo te será un poco incómodo, debes de acostumbrarte poco a poco a la altura e inclinación.

Materiales y densidad

Busca una almohada antireflujo hecha con materiales de alta calidad.

De nada te servirá comprar un cojín antireflujo que tenga poca durabilidad.

La compra de una almohada antireflujo es una inversión fuerte, pero ya que vas a gastar en ella, es mejor gastar en un producto hecho con materiales de alta densidad, que tengan una vida útil larga.

Los cojines antirreflujo de mala calidad son resbalosos e incómodos.

Nuestro material preferido es la espuma viscoelástica, porque es capaz de moldarse a la forma de tu cabeza y regresar a su forma original rápidamente.

Funda

Siempre debes de prestar atención a la funda de tu almohada, sin importar el tipo de almohada que utilices.

La funda de una almohada es lo que estará en contacto directo con tu piel, por eso es muy importante conocer su composición.

Te recomendamos elegir una funda hecha con fibras naturales, puede ser algodón, aloe vera o látex natural.

Las fibras naturales suelen ser hipoalergénicas, lo que es muy importante para evitar alergias e irritaciones en la piel.

También te sugerimos buscar una almohada desenfundable. Si tu cojín antireflujo tiene funda extraíble, será mucho más fácil y práctico su mantenimiento.

Las almohadas antireflujo tienen un diseño especial en forma de cuña que brindan un soporte muy cómodo, pero sin perder la elevación de la parte superior del cuerpo.

Las almohadas antireflujo se dividen en almohadas para adultos y almohadas para bebés.

Almohadas antireflujo para adultos.

El uso de una almohada de cuña en adultos brinda diversos beneficios en la salud.

Mejora el flujo sanguíneo en todo el cuerpo, brinda frescura al dormir, otorga un buen apoyo en la espalda, evita ronquidos y principalmente, elimina el reflujo estomacal durante tu sueño.

Además, las almohadas elevadas pueden usarse en la parte inferior del cuerpo, ya que son una gran opción para aliviar el dolor de espalda, dolor de rodilla, venas varicosas y mucho más.

Almohadas antireflujo para bebés.

Estas almohadas funcionan como cojines en forma de cuñas elevadas.

Su función es evitar que los bebés se ahoguen al momento de regurgitar sus alimentos y evitando el reflujo, previniendo la broncoaspiración.

El origen de estas almohadas antireflujo para bebé se debe a que no todos los bebés tienen el aparato digestivo totalmente desarrollado al nacer.

Por este motivo, muchos sufren de reflujo gástrico durante los primeros meses de vida.

Si tu malestar es más muscular que de reflujo gastroesofágico, el problema tal vez no sea tu almohada, sino tu colchón.

Un buen colchón es necesario para tener un descanso óptimo y no sufrir de dolores cervicales.

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